Helado de fresas maceradas

Helados veganos de fresa, handmade y homemade :)

Con las últimas fresas de la temporada y que por fin empieza a hacer calorcito, decidí macerarlas en azúcar moreno y hacer con ellas un helado cremoso con base de leche de coco en lugar de nata. Es prácticamente lo mismo en textura y nivel de grasa y el sabor del coco no mata el de las fresas, al contrario, lo potencia dándole cremosidad igual que la nata.

No tengo heladera (bueno sí, una de hace 15 años de Lidl a la que le falta una pieza y entonces no la puedo cerrar ni utilizar) pero como el truco está en romper cada poco los cristales que se forman en el proceso de congelación, lo hice a mano y arreando! 

Aparte, el otro día mi madre me regaló el típico utensilio profesional para hacer bolas de helado. Los teníamos de hace mil años y como ella no los usa, pues... los tres tamaños que me traje a casa encantada de la vida y que no he tardado nada en utilizar!

Y para terminar, aunque en la foto no se ve, el helado está regado a la hora de servirlo con sirope de fresas muy ligero, del que sale al macerar las fresas.

Ingredientes:

10 - 12 fresas de tamaño medio

1 vaso de leche de coco espesa (200ml aproximadamente)

4 cucharadas de azúcar moreno

2 cucharadas de leche de soja (valdría cualquier otra vegetal)

1 chorrito de zumo de limón (una cucharadita más o menos)

pizca de sal

Preparación:

• Lavamos y cortamos las fresas en rodajitas.
• Las colocamos sobre una fuente extendidas.
• Las espolvoreamos con la pizca de sal, el zumo de limón y las cucharadas de azúcar.
• Dejamos que se maceren a temperatura ambiente mínimo media hora, o hasta que se haya disuelto todo el azúcar y haya salido el jugo de las fresas convertido en sirope.
• Reservamos unas rodajas y un poco del sirope para decorar con ello a la hora de servir.
• Pasamos por la batidora las fresas con todo su jugo, junto con la leche de coco y de soja.
• Vertemos la mezcla en un tupper.
• Llevamos al congelador, tapado para que no coja olores, por si acaso.
• Cada hora aproximadamente sacamos el tupper del congelador y removemos bien la mezcla para romper los cristales de hielo que se van formando, con un tenedor por ejemplo.
• Así varias veces hasta que se haya congelado y esté cremoso.

• A la hora de servirlo, lo sacamos del congelador unos minutos antes para poder hacer las bolas con más comodidad. 
• Las adornamos con las fresas maceradas y un chorrito de sirope del que teníamos reservado. Yo le puse también media galleta Digestive como veis en la foto, porque me gustan más que las obleas, y porque tienen más consistencia y así no se quedan blanduchas enseguida. 

Para hacer la foto y la gracia del día se me ocurrió poner al lado otro helado de fresa que hice para un encargo de trabajo personal, pero en versión sonajero de ganchillo. Podéis ver más fotos aquí si queréis: http://vanvanhandmade.blogspot.com.es/2013/03/sonajero-helado-de-fresa.html

Y nada más, sólo que espero que lo disfrutéis igual que yo!

Helado de fresas maceradas y leche de coco